Aplicar el Design Thinking a nuestra gestión de Recursos Humanos significa poner al empleado en el centro y, a partir de aquí, construir a su alrededor un diseño innovador que solucione todos los posibles problemas que el empleado tenga.
Es decir, partiendo de las necesidades del empleado, diseñaremos soluciones a los posibles problemas del departamento de Recursos Humanos para así crear un vínculo fuerte con los empleados que nos permita conocerlos mejor y formar relaciones a largo plazo con ellos.
Tabla de contenidos
Qué es Design Thinking
Cuando hablamos del Design Thinking en general, estamos hablando de un método de diseño que toma a las personas como referencia y pieza fundamental del diseño. La intención es conseguir resultados innovadores en el diseño, sin tener una preocupación especial por el resultado final.
Para ponerlo en práctica, debemos dar con un diseñador que tenga una especial sensibilidad por las personas y las características más humanas que nos distinguen del resto. Así, el primer paso será detectar las necesidades de la gente para poder crear soluciones tecnológicas factibles e innovadoras.
Ahora bien, al aplicarlo a los RR. HH. de nuestra empresa, debemos colocar al empleado en el centro para conocerlo así detectar los problemas que este pueda tener. Abordar los problemas del departamento desde la perspectiva del empleado es la premisa del Design Thinking aplicado al área de Recursos Humanos.
Las características del Design Thinking:
- Situar al ser humano en el centro para, a partir de él, reflexionar y diseñar el plan de Recursos Humanos.
- Crear formas de innovación partiendo de las necesidades de los empleados.
- Formar a los empleados en Design Thinking para que ellos también puedan aplicarlo a sus procesos, poniendo esta vez al cliente en el centro de la acción.
- Apostar por un programa de RR. HH. que ponga en valor el clima laboral y la buena comunicación.
- Tomando como referencia las preocupaciones del trabajador, construir un programa de ascensos, aumentos y extras que incentive a los buenos trabajadores para evitar la fuga de talentos.
- Arriesgar a la hora de plantear nuevas soluciones, la creatividad siempre es bienvenida.
- Crear un vínculo emocional que nos acerque más al empleado.
- Dar a los empleados un mayor rango de libertad con nuevos sistemas más flexibles que permitan una mejor conciliación.
- Abogar por la empatía en ambas partes para poder crear una simbiosis fructífera.
- Tener siempre en mente una perspectiva a largo plazo, de forma que las soluciones sean igual de efectivas en el futuro.
Ventajas del Design Thinking en Recursos Humanos
La experiencia del trabajador
Con un diseño centrado en las personas, nuestro departamento de Recursos Humanos dará un cambio radical, donde el profesional de la gestión de personas pasará de ser un desarrollador de procesos para convertirse en un arquitecto de experiencias.
Esto implica construir una experiencia significativa y atractiva para los empleados que, durante su ciclo de vida en la empresa se sentirán cómodos y apreciados.
La innovación como objetivo
Mediante el Design Thinking, debemos ser capaces de dotar a la empresa de una nueva dimensión desde la cual entender los procesos. Así, es una oportunidad maravillosa para reimaginar todos los aspectos que tengan relación con el trabajo, desde el espacio físico hasta la forma en la que interactúan las personas o reciben formación.
Todo ello, siempre enfocado a conseguir una experiencia lo más agradable y satisfactoria posible para así aumentar los índices de productividad.
La oportunidad de detectar otros fallos gracias al Design Thinking
Gracias al enfoque multidisciplinar de esta técnica, el Design Thinking nos ofrece la oportunidad de detectar otros fallos en distintas áreas de la empresa que puedan estar afectando a la gestión de Recursos Humanos.
La tecnología, el gran aliado
Desde el Big Data hasta las herramientas tecnológicas más cotidianas, toda la tecnología será nuestra gran arma para un diseño inteligente.
Así, diseñar una experiencia de empleado favorable pasa por crear herramientas digitales que faciliten los procesos y sean accesibles desde cualquier dispositivo.
Aboga por dar peso al empleado
El hecho de colocar al empleado en el centro de la gestión de Recursos Humanos hace del design Thinking una herramienta idónea para continuar poniendo en valor la importancia del empleado en la empresa.
Lo que se pretende es, que, en todos los procesos, se tenga en cuenta la comodidad del trabajador para que este pueda así dar todo lo mejor de sí mismo.
Aplicaciones del design Thinking en Recursos Humanos
Innovación desde la mirada del empleado
El primer paso para abordar correctamente una estrategia de Design Thinking en la gestión de personas es hablar con los empleados para identificar sus necesidades. La innovación carece de sentido sino está enfocada a mejorar en todo momento la calidad de vida del trabajador dentro del ámbito profesional.
Por tanto, no se trata de una crear una herramienta para hacer alarde de nuestra tecnología, sino de crear un método cuya principal innovación sea la simplificación al máximo de todos los procesos relacionados con los Recursos Humanos.
Design Thinking para mejorar el clima laboral
Por su propia naturaleza, el Design Thinking puede convertirse en una herramienta idónea para mejorar el clima de la empresa. Al facilitar los procesos, nos encontraremos con trabajadores más contentos que contribuirán de forma positiva a la convivencia de toda la plantilla.
Para poder seguir un registro de estas mejoras, es fundamental contar con un software de Recursos Humanos que nos permita medir el clima laboral periódicamente como el software de Encuestas a Empleados de Bizneo HR, que nos permite llevar a cabo un sondeo de la opinión general de los trabajadores.
Con este programa podremos:
- Medir el posible impacto de las decisiones estratégicas, facilitando así el trabajo a los líderes y directivos.
- Construir una cultura corporativa enfocada a la opinión y mejora continua.
- Generar conversaciones más allá de formularios.
- Aprender a escuchar e interpretar la información.
- Tener a nuestro alcance toda la información a evaluar en una sola herramienta.
Design Thinking y Candidate Experience
Tradicionalmente, el Design Thinking ha estado enfocado a crear una experiencia de cliente lo más satisfactoria posible, pero muchas veces, esto ha fracasado porque los empleados no se sienten partícipes de esta cultura.
Por ello, aplicar el Design Thinking a los Recursos Humanos nos permiten alinear la experiencia de cliente con la de empleado, creando así una empresa más comprometida y auténtica, en cuyo núcleo se encuentran las personas y cuya prioridad es responder de forma inteligente a sus necesidades.
Ejemplos de design Thinking en RR. HH.
Grandes multinacionales como, por ejemplo, P&G llevan años apostando por esta metodología para así desarrollar mejores competencias en el campo de la innovación enfocada a los empleados. De hecho, su gestión de RR. HH. se ha basado desde hace tiempo en crear una nueva mentalidad que nos permita adquirir aptitudes y capacidades útiles en todos los proyectos de la empresa, sea cual sea la naturaleza de estos.
En el caso de Nestlé, a empresa de alimentación aboga por desarrollar programas de aprendizaje experiencial que han resultado muy útiles. Parten del día a día del propio empleado para, en este contexto, crear una simulación que conlleve una formación implícita.
En el caso de Coca-Cola, el Design Thinking ha conseguido cambiar por completo la visión del empleado para convertirlo en un cliente de la empresa. Así, el objetivo principal de los Recursos Humanos es hacer que el trabajador tenga una buena experiencia en la compañía.
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